El daño a tu salud causado por el aceite de palma
El aceite de palma: un producto en auge pero poco saludable
El aceite de palma, obtenido del fruto de una especie de palma africana, ha ganado popularidad y se ha convertido en el aceite más utilizado en todo el mundo. Sin embargo, su dominio en la industria alimentaria y otros sectores no implica que sea una opción saludable.
La obtención del aceite de palma
Este aceite se extrae de la pulpa prensada de los frutos de la palma, que crece rápidamente y puede vivir hasta más de 100 años. Aunque los frutos se asemejan a las almendras y están cubiertos por un tejido ceroso, es de su pulpa de donde se obtiene este polémico aceite.
Una mezcla de grasa y aceite con altos niveles de grasas saturadas
El aceite de palma es una combinación de grasa y aceite compuesta principalmente por ácido oleico y ácidos grasos saturados, como el ácido palmítico y el ácido esteárico. Estos últimos son los responsables de su popularidad en la industria, pero también los que aumentan los riesgos para la salud. A pesar de ello, el aceite de palma y el aceite de soja se han convertido en los más empleados en la alimentación, la cosmética y otras industrias.
Usos del aceite de palma en la industria alimentaria
La industria alimentaria utiliza el aceite de palma principalmente para freír y aliñar, aunque también se encuentra presente en muchos otros productos como la bollería industrial, las coberturas y cremas, los helados, las margarinas y otros productos de untar, las natillas, los platos precocinados y una amplia variedad de aperitivos y snacks salados.
Impacto negativo en la salud cardiovascular
Aunque el aceite de palma crudo ofrece algunas vitaminas beneficiosas, su consumo puede tener consecuencias devastadoras para la salud debido a su alto contenido de grasas saturadas. Este aceite es un factor de riesgo cardiovascular, ya que aumenta los niveles de colesterol LDL (o «colesterol malo») y disminuye el colesterol HDL (o «colesterol bueno»), lo cual puede obstruir las arterias. Eliminar el aceite de palma de la alimentación habitual podría ayudar a prevenir estas enfermedades.
Relación con la metástasis del cáncer
Un estudio publicado en la revista Nature revela una conexión directa entre el consumo de aceite de palma y la propagación del cáncer a través de la metástasis. Según la investigación conducida por Salvador Aznar-Benitah y su equipo en el Institut de Recerca Biomèdica de Barcelona, los ácidos grasos presentes en el aceite de palma tienen un efecto potenciador en la diseminación del cáncer en el cuerpo.
A pesar de su amplio uso en diversas industrias, el aceite de palma plantea serias preocupaciones para la salud y el medio ambiente. Si bien es importante estar conscientes de las elecciones que hacemos en nuestra alimentación y elevar la demanda de alternativas más saludables, también es fundamental que las empresas y los gobiernos tomen medidas para reducir la utilización de este aceite controvertido.